Digestión-absorbido y asimilado

Digestion

En la medicina occidental, la mala digestión a menudo se describe a través de una variedad de afecciones como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), la enfermedad celíaca, el síndrome del intestino irritable (SII), la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. La gastroparesia se refiere específicamente al retraso en el vaciamiento gástrico, lo que resulta en tasas de digestión impredecibles (Camilleri et al., Gastroenterology, 2018). Por otro lado, la Medicina Tradicional China (MTC) atribuye muchos problemas digestivos a un patrón de falta de armonía conocido como deficiencia de Qi del Bazo, que está influenciado por una mala alimentación, el estrés y los ambientes húmedos. Este patrón suele estar marcado por mala digestión, fatiga y heces blandas (Maciocia, "The Foundations of Chinese Medicine", 2015). Según la MTC, un Qi del Bazo débil dificulta la transformación y el transporte del "Qi de los alimentos", lo que lleva a la formación de humedad y flema. Tanto el paradigma occidental como el de la medicina tradicional china ofrecen perspectivas valiosas: la medicina occidental se centra en trastornos específicos como la ERGE y el síndrome del intestino irritable (Ford et al., Gut, 2014; Longstreth et al., Gastroenterology, 2006) y la medicina tradicional china ofrece una visión holística centrada en los desequilibrios del Qi. .